Reagrupar a los rivales

No acababa de terminar el recuento de los votos de la consulta popular del 1 de agosto, cuando el presidente López Obrador estaba lanzando un nuevo reto. “Viene la revocación de mandato en marzo y va a ser interesantísimo; no nos vamos a aburrir, no vamos a estar bostezando porque el bloque conservador tiene ahora la oportunidad de reagruparse”.

Reagrupar a los rivales

No acababa de terminar el recuento de los votos de la consulta popular del 1 de agosto, cuando el presidente López Obrador estaba lanzando un nuevo reto. “Viene la revocación de mandato en marzo y va a ser interesantísimo; no nos vamos a aburrir, no vamos a estar bostezando porque el bloque conservador tiene ahora la oportunidad de reagruparse”.

En plan combativo se refirió a los opositores: “Retrógradas, conservadores, corruptos, individualistas, egoístas, clasistas, racistas, bueno, no pudieron y ahora viene de nuevo otro desafío; que se vuelvan a agrupar para que llamen al pueblo a que voten para que yo me vaya. Es la revocación de mandato, esto es la democracia”.

La oposición piensa que la consulta del 1 de agosto fue una gran derrota para el presidente; después de todo, solo 7.11 por ciento de los electores empadronados acudió a votar. Quienes lo piensan, sin embargo, no han entendido la estrategia de López Obrador.

Para el presidente lo importante es mantenerse como centro de atención, imponer la agenda política, estar siempre en campaña. El que solo un porcentaje pequeño de los ciudadanos empadronados haya acudido a las urnas no es un problema para él. El triunfo radica en que 6.5 millones de ciudadanos acudieron a sufragar en una consulta con una pregunta ininteligible, y que quienes se presentaron aprobaron en un 97.7 por ciento una propuesta que, en su interpretación, señala a todos los presidentes anteriores como corruptos mientras que él se declara honesto: “No somos iguales”.

El presidente buscará ahora prolongar este triunfo con una nueva campaña que culminará el 21 de marzo del 2022 en otra consulta, la de revocación de mandato. Se siente seguro de que obtendrá, una vez más, un respaldo abrumador. No es solo que su popularidad se mantiene a niveles superiores al 60 por ciento, sino que, una vez más, sus seguidores son los que acudirán a votar.

Por eso ha lanzado el reto a sus rivales: agrúpense, “ahí tienen otra oportunidad”. Él sabe que ganará el voto de revocación. Solo tendrá entonces que pensar en los nuevos retos, en los nuevos informes, desplantes y consultas que lo mantendrán en campaña hasta el último día de su mandato.

Twitter: @SergioSarmiento

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