Garantizar electricidad
El periodista Sergio Sarmiento aborda la propuesta del presidente López Obrador para ayudar a Belice con electricidad.
Este 21 de mayo el mandatario lo señaló en su mañanera: “Acabamos de tener una reunión con el primer ministro de Belice y hay un acuerdo con ellos de ayudarles también con energía eléctrica. Aun con esta situación especial por el calor, se va a cumplir con el acuerdo de ayudarles para que no les falte la energía eléctrica en el caso de Belice. Somos pueblos hermanos, somos vecinos y tenemos que ayudarnos mutuamente”.
México ha sufrido este mayo varios estados de alerta y emergencia en el sistema eléctrico nacional lo cual ha llevado al Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) a realizar varios apagones preventivos. El presidente afirma que no hay nada de qué preocuparse. “Si tenemos ahora este déficit en generación es porque estamos por terminar, se nos demoraron, algunas plantas de ciclo combinado, pero se está trabajando y ya pronto se va a regularizar y se resuelve el problema hacia delante, o sea, es un asunto transitorio”.
Los especialistas en energía tienen otros datos. La generación se ha quedado estancada desde 2019, cuando el presidente detuvo una serie de proyectos de nuevas plantas privadas con el fin de dar preferencia a las de la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Esta empezó la construcción de cinco nuevas plantas de ciclo combinado de gas, pero muy tarde; además los proyectos se han retrasado, como ha reconocido el propio presidente. Aunque la CFE presume que tiene una capacidad instalada de 85,000 megavatios (MW), las situaciones de emergencia y los apagones se han registrado por debajo de los 50,000 de demanda. ¿Por qué? Porque buena parte de la capacidad de la CFE es obsoleta, de plantas viejas que con frecuencia salen de línea; y mucha viene de presas, favorecidas por las políticas de López Obrador, que con la actual sequía casi no pueden generar.
Las cinco nuevas plantas, que tendrán un costo de 3,445 millones de dólares, no resolverán el problema. En conjunto aportarán solamente unos 4,000 MW. Este año, que está siendo particularmente cálido, se prevén picos de demanda de 55,000 MW. En el futuro las cosas se pondrán más complicadas. Según Guillermo García Alcocer, expresidente de la Comisión Reguladora de Energía, para abastecer al país en las actuales circunstancias de crecimiento moderado se necesitarían unos 5,000 millones de dólares al año de inversión en generación, transmisión y distribución. Si la actividad económica del país crece por la reubicación de empresas, el nearshoring, se requeriría una inversión de 6.400 millones de dólares al año. La CFE, que ha perdido 71,270 millones de pesos, unos 4,190 millones de dólares, en este sexenio, no tiene ese capital y el gobierno no está permitiendo nueva inversión privada en electricidad.
El poco dinero que hay se malgasta. El gobierno utilizó 6,200 millones de dólares para comprar 13 plantas viejas de la española Iberdrola, solo para presumir que la CFE ha logrado ya un 54 por ciento de la producción nacional de electricidad, sin que se haya sumado un solo megavatio a la oferta nacional de energía. Ahora el presidente nos dice que parte de esa energía que no nos alcanza le será entregada a Belice, sin que sepamos si se pagará a precios de mercado o se regalará. Hay razones para estar preocupados.