Ejecutivos también deben ahorrar, aquí los bancos que enseñan mejor

A estas alturas del siglo XXI en México, la tecnología y la sociedad del conocimiento nos brindan herramientas para ser más eficaces en nuestras actividades cotidianas y aprovechar al máximo nuestra vida. El manejo del dinero también puede realizarse de forma eficiente y responsable: esa es la esencia de la educación financiera. Hay un amplio sector de la población que aún no ha sido instruido y es sumamente importante: sin duda que desde la familia se debe trabajar en estos temas, pero los bancos y las instituciones financieras tienen una gran responsabilidad. Por eso, hay que revisar quiénes sí están comprometidos con esa labor.

Ejecutivos también deben ahorrar

A estas alturas del siglo XXI en México, la tecnología y la sociedad del conocimiento nos brindan herramientas para ser más eficaces en nuestras actividades cotidianas y aprovechar al máximo nuestra vida. El manejo del dinero también puede realizarse de forma eficiente y responsable: esa es la esencia de la educación financiera. Hay un amplio sector de la población que aún no ha sido instruido y es sumamente importante: sin duda que desde la familia se debe trabajar en estos temas, pero los bancos y las instituciones financieras tienen una gran responsabilidad. Por eso, hay que revisar quiénes sí están comprometidos con esa labor.

Hay que entender en un inicio que las directrices y el impulso principal de la educación financiera vienen por parte de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef); porque el objetivo principal es sacar el mejor provecho de nuestros recursos y utilizar los servicios financieros para cubrir nuestras necesidades y alcanzar el mayor número de metas posibles. El gobierno debe buscar que los ciudadanos ejerzan plenamente sus derechos

Los expertos en la materia advierten que prácticamente en todas las etapas de la vida tenemos contacto con el dinero y con actos financieros: desde el niño al que se le da un “domingo” o una mesada, el adolescente que aprende a administrar sus ahorros, hasta el inicio de nuestra vida laboral o la búsqueda de cómo emprender un negocio.

Desde más temprano es mejor, pero nunca es tarde para aprender todo lo relacionado a nuestras finanzas. Los bancos están conscientes de ello, es parte de su responsabilidad social pero a final de cuentas hay quienes lo tienen como una prioridad; porque saben que quien aprenda mejor lo que significa adquirir un crédito, comprar un seguro o manejar una tarjeta de crédito será un usuario más responsable y con mayores posibilidades de crecimiento.

En entrevista para Político.mx, Ingrid Pacheco, coordinadora de Divulgación del Museo Interactivo de Economía (MIDE) pone el énfasis en un punto fundamental: tener la práctica y el hábito de ahorrar, por más complicado que pueda parecer. Explica que solo puede consumarse si efectivamente se practica; si se supera el tabú de “que no es (el recurso) que te sobra, sino que es una de las cajitas en lo que se divida nuestro presupuesto”.

Es ahí donde los bancos deben ofrecer las ventajas de esa práctica, fomentarlo con diversos productos y con distintas estrategias. La propia Condusef establece un ranking donde instituciones como Banco Azteca, BBVA Bancomer, Citibanamex y Santander cuentan con programas específicos para apoyar a sus clientes y usuarios.

Llama la atención la estrategia amplia que ha desplegado Banco Azteca: pone a disposición de todo tipo de usuarios, sin importar edad, género o condición económica, distintas opciones para aprender del buen manejo de su dinero. Un ejemplo es su presencia en el Museo Interactivo de Economía (MIDE), donde recientemente inauguró una exposición titulada “Academia espacial de ahorronautas”, ahí niños, jóvenes y adultos aprenden con un lenguaje claro y el uso de tecnología sobre finanzas personales.

Para los jóvenes, la seguridad tecnológica, el ahorro formal y el uso inteligente de la tarjeta de crédito, así como los beneficio de una cuenta de inversión, son algunas de las lecciones que se contemplan en el programa de educación financiera de Banco Azteca. Toda una serie de materiales que ofrece el banco sin escatimar en tecnología de punta: desde un portal amigable e intuitivo que ha recibido reconocimientos, pasando por cursos, talleres, tutoriales en redes sociales, hasta el uso de realidad virtual o ampliada para explicar todo tipo de procesos financieros.

Esto se complementa con la innovación y los beneficios de contar con una aplicación sencilla y funcional para dispositivos personales que permite hacer pagos y transferencias desde cualquier lugar. Esta lo ha hecho merecedor de “5 estrellas” en el rubro de nivel de colaboración voluntaria a decir de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).

Todo eso tiene que ver con inclusión y educación financiera ya que afecta directamente al cliente. El objetivo es explicarle con claridad lo que necesita saber, y no solo lo que pregunta al momento de realizar una operación, eso es parte de la responsabilidad social de los bancos. Mientras mayor número de bancos se sumen a estas prácticas de la educación financiera, mayor será el blindaje de la economía personal, y por tanto, de la economía general; se reducen prácticas de riesgo, se minimizan las posibilidades de engaños o fraudes, y se tiene perspectivas de crecimiento más seguras a mayores plazos. Los mexicanos del siglo XXI contamos con estas ventajas como no había ocurrido en otro periodo de nuestra historia económica. Con más y mejor educación financiera, ganan los usuarios, ganan los bancos, ganamos todos.